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24/5/10

Cumpliendo con todos

Es mi cumpleaños!!
Ver en un mapa más grande


Me despierto con gran energía. Para empezar la mañana recordando mis raices, tienen la delicadeza de deleitarme con una romería desde el balcón.

A las 10, nunca antes un domingo, comenzamos la ruta con Los Respetables: 400 kms. a una media de 80kms./hora...
80 kms/hora... por carreteras blancas en el mapa!! Elegidas cuidadosamente. Me llevo la cordura armada porque -paradojas-: sé que haré el loco celebrando.

Un perro grande mira cómo la liamos.

Ráfales. Comemos manjares de la tierra: el adobo aquí no se refiere a pimentón, sino a deliciosas cárnicas en aceite servidas por un camarero de lo más solícito.
Esta es una de esas cosas que no me puedo creer aunque las vea y que ponen de manifiesto que mi moto, y todas las que son como ella, no es nada versátil. Lo ví nada menos que 3 veces, que fué el tiempo que tardé en situarme para la foto. Al final había lo menos 15 personas mirando.
Mira qué contentos están.La segunda parada después de curvear sin levantar la vista de la carretera - bueno, en Morella, si, que ese castillo me impresiona siempre -. Tras los 100 metros malos de rigor por pista bastante buena llegamos 'Al Salt'.
Dalí y Gaudí invaden mi mente en este lugar. El agua ha dejado estas formas orgánicas en la roca.
El paisaje parece una continuación de la carretera por la que hemos venido: perfectamente elegida por sus curvitas suaves, donde el radio de giro resulta perfecto para máquinas largas. Y el pavimento sin estridencias, de forma que no hay que forzar trayectorias.
En la foto parece más pequeña, pero el desnivel hasta la playa es enorme!
Hay muchas formas de usar una moto, y decididamente, ésta también me gusta. La próxima vez me traigo el integral. Pero creo que pasará un tiempo prudencial antes de que ocurra.
Las malas compañías me afectan: tengo que confesar que una vez pisé las rayas para acortar una curva y poder ir más rápido. Y otra vez ocurrió una cosa con una línea contínua y un coche que iba DEMASIADO despacio y mis colegas que se alejaban,... y tengo que reconocer que sí quería ir más deprisa, más.
Borracha de curvas, de velocidad, de frenesí llegamos como colofón al circuito de Alcañiz. En el aire los ruidos de motores, al fondo el lago, nuestras máquinas crepitando como el pan recién hecho que compramos en Bailo.
Y terminamos con un racimo de birras que se reproducen contínuamente. Enciendo el móvil ahora, porque en el resto del camino habría sido absurdo siquiera intentarlo.
Y empiezan a llegar montones de mensajes que leo con otra birra en la mano, y me doy cuenta de que estoy brindando con todos!!! En mi cumple, cumpliendo con todos!! Muchas gracias a todos por estar!

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